lunes, 30 de agosto de 2010

LA TRONADA


Fue el jueves, al salir de trabajar y coger el coche para volver a casa. Encendí la radio y ahí estaba, La Tronada de la Ronda de Boltaña. El ataque de nostalgia, hizo que me temblaran las piernas y de golpe y porrazo en encontré de nuevo en otro tiempo y otro lugar, tan intenso como felíz.
Me ocurre también con los olores. Como no suelo usar perfumes, continuamente voy cambiando cremas, champús y geles y guardo un poquito en el fondo del bote para que al recuperarlos, meses después, el olor me lleve al tiempo en que eran cotidianos.
También escondo notas, etiquetas de ropa, entradas de cines y conciertos o billetes de avión y tren en los libros, para que al ojearlos de nuevo me lleven al lugar y circunstancias en que los leí por primera vez.

Es como viajar al pasado, sin máquina del tiempo. Lo malo, claro, es que viajas sola y para la Tronada como para muchas cosas en esta vida necesitas rodearte de buena gente.

1 comentario:

indo dijo...

a mí también me pasa, sobre todo con olores o canciones, que me trasladan na otros sitios, otros momentos, otras gentes. y a veces me gusta y otras me llena de morriña tristona.
un beso.