Casi con mes y medio de antelación, mi sobrino ha llegado al mundo. Nos pilló a todos desparramaos por el mundo y con la cuna de IKEA sin montar. La última semana ha sido una marathon de trenes, taxis y autopistas hasta que por fin, el sábado conseguíamos juntarnos todos en el hospital en el pasillo de apenas un metro que rodea la sala de incubadoras.
Como os podreis imaginar es el más guapo, el más despierto, el más largo, el más, el más, el más...
Tiene a los padres babeando y a los abuelos fundiendo las visas a todo trapo. Y yo, la verdad, aún no me he hecho demasiado a la idea. Verlo con un cristal de por medio no es lo mismo que tenerlo en brazos pero el mundo de la ropa y los accesorios de bebé me tiene ya abducida. Hay que ver la cantidad de cosas que necesita un niño pequeño! Y más allá de las que necesita, la cantidad de chorradas que una horda de padre, abuelos y tíos primerizos pueden encontrar en el Toys´r´us...
Respecto a los otros niños, a mis alumnos en la Universidad, he de reconocer aquí públicamente que mi queridísimo F. tenía razón. Va a resultar que esto de la docencia, al final va a ser lo mío. Disfruto como loca con ellos y quiero creer que ellos lo pasan bien en mi clases, entre otras cosas porque las asignaturas prácticas tienen la ventaja del roce directo. Quien sabe? a lo mejor algún día, puedo tener un retiro dorado en el claustro y dedicarme a la filosófía pura.
Dos cosas y termino. El romance de mi mejor amiga marcha viento en popa y a toda vela y solo puedo decir, que ya era hora de que por fin encontrara un tio como éste. Ella es una de las mejores personas del mundo. Es divertida, generosa, inteligente, buena persona, madraza con los amigos y un refugio para desnortados. Estar con ella, es como volver siempre a casa y me alegra inifitamente que sea tan feliz.
Y lo último. Esta mañana ha empezado a nevar en casa. Mi madre, para no variar, me ha vuelto a dar un susto de muerte llamando al móvil tan temprano. Pero era por una buena causa. Estaba nevando... :)
4 comentarios:
jo, qué de cosas, que tenías ya que ponerte al día...
me alegro que todo vaya bien. con nieve y bebés y todo.
no os dejéis arrastrar mucho por la locura del bebé, la gente compra miles de paridas innecesarias que luego no se usan, estorban o no sirven para nada. pero claro, son taaaaaan monas, jajajaja.
enhorabuena por todo y que dure la racha!!!
Bienvenida al club de las tias babeantes...pero recuerda que a quien Dios no le da hijos el diablo le da sobrinos.
Besos Porras
¡¡Felicidades María!! A mi me pareció muy curioso ver a mis hermanas haciendo de madres. Los sobrinos son un gran regalo para toda la familia, además... cuando se ponen pesados... para sus padres. Que lo disfrutes.
Besos
Franché.
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