lunes, 21 de septiembre de 2009

PUEDE QUE SI


Mi madre me cuenta que hoy mi padre (jubilado y dedicado en cuerpo y alma a su huerto, sus viñas y sus frutales) anda vendimiando en la viña de un vecino que en unos días vendrá a casa para empezar con las nuestras. Además, otro vecino que hace unos meses nos ayudó a trasladar una colmena que se había formado entre el contraventano de madera y el cristal, ha traído unos tarros de miel. Y un tercero, que ya ha bajado de puerto con las ovejas, cumplirá este domingo su promesa de prepararnos unas migas de pastor. Ellos, claro, viven ahora en un pueblo de apenas 100 habitantes.

Yo llevo cuatro años viviendo en el mismo piso y apenas conozco a Merche, la vecina de enfrente. En una finca de 40 pisos, no está mal.

Lo pienso mientras Juan, un compañero de trabajo, me cuenta como en su pequeña urbanización de adosados en un pueblo a pocos kilómetros de aquí, lo vecinos se han organizado para ayudar a una familia en apuros. El padre sufrió hace poco un accidente laboral que lo dejó malparado y la situación se ha complicado desde que la madre, al tropezar y caer por las escaleras, se ha roto la pierna por dos sitios distintos. Así que los vecinos, que hasta ahora apenas se conocían se han organizado para llevar y traer los niños al colegio, hacerles la compra y la comida y pasear al perro.

Y quizá no sea más que una excepción, pero puede que no. Puede que al final resulte que si, que es verdad, que la crisis nos está haciendo un poquito más humanos.



3 comentarios:

CMQ dijo...

y yo que pienso que eso sí es algo que se echa de menos, la relación que hay entre los vecinos de los sitios pequeños (para lo bueno y para lo malo, claro)... nos deshumanizamos, pero en casos como los que cuentas se ve que aún queda una lucecita en la oscuridad, por pequeña que sea. Qué gusto.

Labegue dijo...

Pues no hay mal que por bien no venga. Supongo que al final habrá que seguir creyendo en la naturaleza humana, aunque sólo sea por pura supervivencia.

Un beso

Duncan de Gross dijo...

Yo lo creo, se está ganando en comprensión y humanidad, aunque estemos perdiendo dinero...