lunes, 25 de enero de 2010

CUANDO LLEGAN ESTAS FECHAS



No falla. Conforme se va acercando febrero, volvemos a empezar con este agobio que me entra ante la perspectiva de cumplir años de nuevo. Cuanto más me acerco a los 40, más fuerte me da.

Este año además, no me está ayudando nada que en apenas una semana hayan coincidido los nombramientos del nuevo director de TVE y del director general de una Caja de Ahorros de la comunidad, los dos de mi quinta. Tampoco que me reencuentre gracias a Facebook con una amiga a la que no veía desde la universidad y que haya traído ya un par de niños al mundo.

Y mientras, que he hecho yo?

Pues poco, la verdad. En vez de niños tengo una perra a medias con mi ex a la que cada vez veo menos, he cambiado el libro que empecé a escribir hace ya siete años por un montón de informes y todos los árboles que he plantado han sido carrascas u olivos, con lo que posiblemente, habré muerto de vieja antes de verlos crecidos, jajajaja.

Lo más alucinante es que sin embargo no tengo ninguna sensación de tiempo perdido. Al contrario. Acumulo viajes, libros, trabajos, hipotecas, proyectos, mudanzas e incluso un puñadito de hombres fantásticos con los que he tenido la fortuna de ir compartiendo mi vida. Creo firmemente que excepto algún domingo tonto de pereza he aprovechado cada día de mi vida y espero poder seguir haciéndolo los años que me quedan.

Y sin embargo... me agobia pensar que un día me levantaré y me daré cuenta de que he dado el paso definitivo que separa cada una de las etapas de la vida y que no hay marcha atrás, que he dejado de ser una chica para ser una señora y que son las responsabilidades las que dirigen mi vida sin dejarme margen para maniobrar. Me agobia pensar que un día me daré cuenta de que he atravesado el ecuador y que he entrado ya en tiempo de descuento...
Pero ya os digo, no es grave.
Me pasa cada año cuando llegan estas fechas.



lunes, 18 de enero de 2010

DEMONIOS

Que sí, que lo se, que no es políticamente correcto decirlo, pero juro que cuando ayer vi a los bomberos, los ong-nistas y la guardia civil el aeropuerto esperando a De la Vega en vez de cavar en Puerto Príncipe, se me llevaban los demonios.

Y parece mentira que aún me cabreen estas cosas, cuando se con certeza que muchas veces cuestan más dinero estos viajes de foto que lo que se lleva en ayuda real y que para leer un discurso no hace falta cruzarte el océano en avión, que encima contamina un huevo, acompañada de toda la corte que además cobrarán dietas.

Pero ya digo, lo alucinante no es que esto siga pasando. Lo alucinante es que a mí me siga cabreando.

jueves, 14 de enero de 2010

APLAZADORES DE PLACERES



¿Por qué tanta gente tiene la manía de guardar las botellas de vino bueno en espera de “una ocasión especial”, que se retrasa y se retrasa y suele llegar cuando el vino ya se ha estropeado?

¿Por qué hay quien acumula puntos, bonos, vales de descuento que nunca gasta y que terminan caducando?

¿Por qué hay personas que viven preparando viajes que al final nunca realizan?

Algunos sociólogos han comenzado a detectar un perfil de personas que ellos llaman “Aplazadores de placeres”, seres que encuentran satisfacción en guardar lo que en un futuro podría resultarles placentero. No disfrutan del vino en sí, sino de saber que guardan el vino que quizá les hará disfrutar un día en el futuro. Y el vino, termina picándose en la botella.

En el fondo, quizá sea una cuestión de cantidad: el placer de prolongar en el tiempo una espera frente a la brevedad del disfrute. Y a veces, funciona...

lunes, 11 de enero de 2010

DOS AÑOS, DOS.



Esta noche hará dos años que FHMP apareció en mi vida. Acababa de pasar en la cama todas las navidades hecha un trapo, con la peor gripe de mi vida y estrenaba año nuevo y también blog.

Llevaba por aquel entonces siete u ocho meses de recuperada soltería tras una historia más que chunga que a lo tonto, a lo tonto, se estiró durante casi cuatro años de idas y venidas, encuentros y desencuentros, toneladas de dudas y muchos desencantos.

En esos pocos meses sola me pasee por el mercado, encontré grandes amigos e incluso besé a alguna rana. Ninguna se volvió un príncipe.

Y de repente, apareció el. Y desde el primer momento supe que estaría ahí al dia siguiente, y al otro, y al otro. Sin ahogarme, dejándome respirar, pero ahí. Derrochando ternura y siendo a mismo tiempo un roble en el que apoyarme, una sombra en la que descansar.

Desde entonces han pasado dos años sin apenas sentirlo. Dos años despertándonos juntos, cocinando juntos, haciendo zapping juntos, pasando juntos la mayor parte de las vacaciones… y a pesar de eso, a pesar de estar con él al menos 12 horas al día, sigo sintiendo la necesidad de besarlo y abrazarlo a todas horas.

Y si, supongo que en parte él también me ha cambiado. Quizá “mariagobios” se hace mayor o tal vez ha encontrado el refugio que necesitaba o simplemente lo que ha ocurrido es que tuve suerte, suerte de la de verdad. A veces sucede.














sábado, 9 de enero de 2010

Y SI...


No recuerdo bien como salió el tema, solo que fue en una tertulia de sobremesa tras una buena cena cuando alguien lanzó el asunto sobre la mesa:

"Imagina que te enteras de que corre por ahí el rumor de que la pareja de una amiga tuya se la está pegando con otra. Que harías?"

Contarselo. Inmediatamente. De una forma u otra según fuera ella. Medio en broma o en una conversación seria según las circunstancias, pero en cualquier caso, contarselo de inmediato para que estuviera al tanto y no le pillara por sorpresa, para que pudiera mover ficha, para que le sea más fácil decidir.

"De acuerdo, pero... "
y entonces, empezaron los peros y me quedé sola en la defensa de la tesis de que pasara lo que pasara, ella era mi amiga y tenía que saberlo. Y empezaron a apuntarse decenas de posibilidades que ni siquiera me había planteado:

Y si resulta que todo es mentira y causas un daño irreversible?

Y si ella está tan colgada del tipo que te convierte a ti en la mala de la película por haber dudado de él?

Y si en realidad lo sabe pero prefiere hacerse la tonta y solo consigues hacer público algo que ella prefería guardar en su intimidad?


Y si es un acuerdo entre ambos que dura años y tu, al ponerlo en evidencia, vas a romper por querer ir de amiga del alma?

Y si...

Y si...

Y si...


Y si resulta que no siempre las cosas son tan fáciles como parecen?

viernes, 8 de enero de 2010

REGALOS, REGALOS, REGALOS...


FHMP lleva dos días haciendome creer que en realidad no es que los Reyes Magos se hayan olvidado de mí, no, sino que los pobres iban tan cargados que dejaron un super bolso para mí en el Corte Inglés. Así que según él, solo tenemos que ir este fin de semana a elegirlo.

Como ve que tuerzo el morro, me susurra al oído "Lupo, Lupo, Luuuuuuuuuuuuuuuuupo" a ver si trago, mientras me enseña el "Vale por una cafetera Nespresso" que le ha colocado su hermana con un lazo rojo pegado y trata de convencerme de que el vale es "lo normal". Vale, lo normal, pero a mi los Reyes no me han dejado ni siquiera un vale!!!

Cuando le contesto que más vale bolso corrientucho en mano que Lupo volando me echa en cara el regalo de mi último cumpleaños (para quien no recuerde la historia, pinchar aqui http://bienaventuradoslosque.blogspot.com/2009/02/estres.html ) que duerme el sueño de los justos en una estantería, a pesar de que él, que es un sol, terminó comprandome cartuchos de tinta de colorines.

Y es que el tema de los regalos no deja de ser una puñeta que viene a complicarnos la vida en Reyes, cumpleaños y aniversarios, cuando el resto del año se te ocurren siete mil cosas que regalar. Eso, por no hablar de ese efecto todavía no suficientemente estudiado que hace que según rompes con un tío, empiecen a aparecer por todas partes cosas perfectas que le encantarían y que jamás encontraste cuando estaba contigo.

El caso es que a todo esto, el mismo día de Reyes por la tarde y tras detectar que mi regalo tampoco le habia emocionado demasiado, lo escondí a ver que pasaba...

Joer, y mira que ha pasado rato y aún no se ha dado cuenta... como tarde dos días más, lo devuelvo y me compro unos zapatos a juego con el bolso.

jueves, 7 de enero de 2010

BIENVENIDO 2010


Estrenamos el año nuevo una vez más, y gracias a la generosidad de P.y J. que volvieron a recogernos en ese mundo aparte que es B., con este paisaje espectacular. Recordaba esa sensación de estar fuera del tiempo y del mundo esta mañana, cuando volvía a sonar el despertador de nuevo en Zaragoza y fuera estaba tan negro que no permitía ni adivinar el día que tendríamos hoy. Así me ha ido que he venido a currar sin coche y con zapatos de ante, mientras en la calle está nevando.



Miro por la ventana del despacho y certifico, una vez más, que nunca nieva cuando conviene. Nunca un domingo que puedas quedarte en la cama, nunca un sábado para salir por ahí con la perra y echar la mañana entera viéndola disfrutar a lo bestia. No, siempre nieva entre semana, para complicar los viajes, para mojarte los bajos de los pantalones, para que cuando llegue el fin de semana, ya se haya marchado toda.

Por eso es un lujo empezar el año asi, estrenando nevada, con esa sensación de que todo es limpio y nuevo, de que se ha cerrado una puerta y se abre otra distinta.

Ojalá sea así para todos los que tienen que dejar algo atrás.



FELIZ ESTRENO DE AÑO A TODOS