martes, 13 de enero de 2009

HASTA EL FONDO


No puedo evitarlo. Cuando estoy deprimida me da por trastear con papeles viejos y a pesar de saber que me estoy metiendo en un charco de consecuencias imprevisibles, allá que voy y sin botas de goma. Hasta el fondo.

Si hay algo que me gusta en este mundo son los armarios con cajones. Escritorios, secreteres, escribanías... todo lo que permita guardar papel. Amparito lo sabe bien. LLevo años y años envidiándole un escritorio con persiana en el que quiero imaginar, ella escribe su blog.

Con la complicidad de mi madre y a lo largo de los años he conseguido reunir alguno de estos muebles rescatados de desvanes y traperos y que a fuerza de lijar y lijar han quedado como nuevos. Algunos traían historias escondidas en el fondo de los cajones y gracias a esos papeles descubrí vidas apasionantes que quizá algún día lleguen a ser un libro.

Hace algunos meses resumí una historia de amor en un dvd. Centenares de fotos, miles de correos electrónicos, billetes de avión, reservas de hotel, notas manuscritas escaneadas, reseñas de libros leídos a medias, canciones compartidas... varios años metidos en un simple disco.
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Hice algunas copias, entre ellas una en una memoria externa para asegurarme de que aquello no se perdería. Luego, lo pensé mejor y dediqué un fin de semana de duelo a imprimir todo aquello y guardarlo en lo más profundo de uno de esos muebles que ya son parte de mi vida. Aquello me sirvió para enterrar definitivamente aquella etapa y también para darme el placer de saber que alguien, algún día, tendrá la fortuna de encontrar en el fondo de un cajón, una historia así.


9 comentarios:

Thalía dijo...

Qué bonito!

Suena todo muy a película, pero creo que todas lo hacemos. Ponerse a sacar fotos, papeles, cartas, resguardos de cosas, reservas de hotel, billetes de avión, de conciertos.

Recuerdos de esos que miras cuando te ataca la nostalgia.

Besos

Duncan de Gross dijo...

Me parece muy bonito, yo la verdad es que tengo también todo un cajón lleno de cartas, poemas, fotos...Recuerdos...

Lilyth dijo...

Yo también soy amante de los cajones, de las cajas dentro de cajas y los separadores y... uff...

Así que mis recuerdos van guardados en cajas de zapatos con alguna inscripción en la tapa, algún día tendré el valor de revisarlas...

Amparito dijo...

"Los tesoros es mejor que esten escondidos a desaparecidos" me dijo una vez un amigo
Suerte con los tuyos, creadora de tesoros...
Bsos,
Amparito
Pd.- y si, escribo, con el portatil, en el escritorio de persiana que ahora cerraré para pasar a otra cosa: la vida real, despertar a las niñas...

CMQ dijo...

qué maravilla, qué idea tan preciosa la de dejar pasar tu historia a otras manos, que la abrazarán cuando hayan pasado tantos años... quizá tus bisnietos, quizá un desconocido. Me encanta.

Y si, supongo que todos tenemos cajas llenas de recuerdos, mis escritos de épocas oscuras están en un armario, cubiertos de ropa para que no se les oiga gritar...

dudo dijo...

un pedazo de vida rota... algún día lo leerás tú misma y te parecerá una historia casi ajena...
Hasta entonces, en el fondo del cajón. Que es su sitio.

Anónimo dijo...

Post sin duda alguna emocionante y tremendamente sensible y romántico, al menos para mi. Felicidades.
Creo que todos guardamos recuerdos en lugares que, en aquellos años, representaron un significado de intimidad.
Abrir la caja de puros en la que guardo todas las cartas de mis "novietas", me hace recordar lo feliz que tambioén fui en los ochenta.
Richi.

Anónimo dijo...

Joooo, María,comparto tu amor a guardar recuerdos en el fondo de un armario, donde van acumulando solera como los buenos vinos, aunque no necesito desempolvar nada, pues mi memoria es buena.

Pero a riesgo de que suene cursi, tengo un pequeño cajón en el fondo de mi corazón donde se aloja una historia como esa. No puedo archivar mi vida, es parte de mí.

Cuídate.
Besos

cristal00k dijo...

Nunca mueren del todo esas historias.
Pero no creo que la estuvieras enterrando. Al contrario, si esperas que alguien la haga suya y la incluya en su caja de los tesoros, es que deseas que no muera.
Precioso María.
Besos.