
Justo en el día en que la prensa publica que el archifamoso Harry Potter podria ser un plagio, leo en el blog de Cristal (http://cristal00k.blogspot.com/2009/06/de-copias-y-originales.html) que ella acaba de enfrentarse al soponcio que supone ver uno de tus textos utilizados "by the face" por uno de esos "presuntos autores" que no son más que vampiros sin vergüenza.
Suerte has tenido, Cristal, de que tu amigo haya encontrado la copia y te haya advertido, porque... ¿cuantos no andarán por ahí plagiando y colgándose medallas gracias al trabajo de otro sin que nadie llegue nunca a enterarse?
Si embargo a mi, hay algo que me flipa todavía más que la falta de vergüenza de esta gentuza capaz de aprovechar el trabajo de otros (que muchas veces no es más que una afición puesta además a disposición de cualquiera gratuitamente con la generosidad que implica un blog), sino las nulas consecuencias que esto tiene. La lista es larga, desde Ana "Cosa" Quintana con aquel escándalo sobre el libro escrito por un "negro" a las fusiladas perpetradas por Lucía Etxebarría o incluso las acusaciones que llegaron a salpicar a gente de la talla de Eduardo Haro Tecglen o Camilo José Cela. Ana "Cosa" sigue siendo la reina de la televisión más maruja y tiene incluso una revista mensual que presuntamente "edita" y en la que supongo, se limita a posar haciendo posturitas para que el mago del photoshop de turno la deje como una quinceañera, la Etxbarría mantiene su página en un dominical y sigue publicando y de Haro Tecglen pronto veremos otro libro en las estanterías. De Cela, no tengo ninguna duda de que su viuda cualquier dia se saca una manuscrito inédito de la manga.
Si escándalos de tal magnitud no han tenido ninguna consecuencia ... ¿como va a tenerlos que alguien copie los textos de cualquiera de nosotros, que al fin y al cabo no somos más que blogueros anónimos?
Con este panorama en los útlimos tiempos han proliferado las empresas que te "venden" licencias de protección de tus contenidos, algo tan absurdo y cabreante en un estado de derecho como tener que pagar a alguien para que vigile tu coche cuando lo dejas aparcado en la calle. El problema es que sabes que si alguien te roba el coche o el bolso, la policía se pone en marcha y tarde o temprano es posible que haya resultados. Sin embargo, cuando alguien te roba un texto no pasa nada. Nada.
Y puestos a pensar y pensar en las decenas de pobres subsaharianos que ahora mismo están en cárceles españolas por vender pelis y cds pirateados... ¿no será que los escritores no tenemos detrás una SGAE con figurines como Miguel Ríos, Ana Belén o Víctor Manuel que se hacen fotos con ZP en plena campaña electoral? Pobrecitos, llevan treinta años viviendo de las mismas canciones... vamos a protegerselas, no vaya a ser que dejen de ingresar la millonada que en concepto de derechos ingresan todos los meses.
Pero no vamos a echarle la culpa al Ministerio de Cultura por no ponerse manos a la obra de una vez por todas, no. Al fin y al cabo, para ellos los blogueros no somos más que una panda de hippies con mucho tiempo libre y bastante trabajo tienen ellos con negociar las subvenciones a cine español como para perderlo con una minucia como los derechos de autor de los escritores...
Al fin y al cabo, ¿quien lee en España ya?