VUELVO

M. me envía un correo que más o menos, viene a decir así:

"Hola A. Hace mucho tiempo que no publicas en tu blog y estoy un poco preocupado. Espero que todo te vaya bien. Si necesitas algo, dilo. Un beso."

Y miro y me doy cuenta de que tiene razón para preocuparse, que llevo semanas desaparecida en combate de la vida virtual y de la real, que apenas he hecho nada más allá de trabajar, viajar, dormir y, es cierto, tomarme unas pequeñas vacaciones fuera esta pasada semana.

No es el único. Hace unos pocos días A. me pidió una reunión como si de trabajo se tratara. Dice que lleva meses sin verme y que si no es así, no se asegura media hora de tranquilidad para tomarse un café conmigo.

Menudo plan.

Y podría echarle la culpa a este invierno tan largo, al exceso de trabajo que suma sueño y cansancio o a que afortunadamente, después de más de un año todavía me faltan horas al día para estar con FHMP, pero en realidad la que se ha dejado arrastrar por la desidia he sido yo. Y así, yendo de casa al trabajo y del trabajo a casa con la excepción de alguna escapada de fin de semana y el cine de los miércoles, se van pasando las semanas, los meses y si me apuras, los años.

Asi que gracias, M. por darme este toque. Se acabó la modorra. Vuelvo a la vida social. Vuelvo al blog. Vuelvo.