Mi jefa me regala dos pases VIP para Montmeló y como mis planes para este fin de semana andan en el otro extremo del mapa se los ofrezco a mi hermano, que vive en Barcelona pero trabaja en Madrid.
Quedamos en que se los envío por correo y con los pases en un sobre me acerco a la hora de comer a la oficina de Correos que hay en el Hipercor junto a mi casa.
Son las tres y media de la tarde y tras el mostrador, tres señoras permanecen enfrascadas en una pantalla de ordenador, una pila de cartas y un sello de caucho respectivamente, mientras un par de clientes esperamos pacientemente haciendo todos los ruidos posibles que ellas, por supuesto, ignoran.
Por fin, una de ellas se percata de nuestra existencia y tiene a bien acercarse al mostrador.
ELLA. Mmmmmmmmmmmmmm
YO. Buenas, querría enviar esta carta urgente a Barcelona.
ELLA. Lo más rápido es Postal Express. Nueve euros con cincuenta.
YO. Hostias! Mil seiscientas pelas por mandar un sobre a Barcelona?
ELLA. Mmmmmmmmmmmmmm
YO. Que otras opciones hay?
ELLA. Puede mandarlo urgente, pero no es seguro que llegue.
YO. Como que no es seguro que llegue?
ELLA. Pues eso, que puede llegar o puede perderse.
YO. Y hay alguna forma de asegurarme que llega?
ELLA. M mmmmmmmmmmmmm
YO. M mmmmmmmmmmmmm
ELLA: Puede certificarla.
YO. Vale
ELLA: Certificada urgente, son cuatro con sesenta.
YO. Certificada y urgente me asegura que antes del viernes llega a Barcelona?
ELLA: A Barcelona si. Al destinatario no.
YO: Perdón?
ELLA: Claro, si no está en casa cuando llegue el cartero, le dejará un aviso y el destinatario tendrá que ir a buscarlo a la oficina más cercana, en horario de nueve a ocho de lunes a viernes y de nueve a una los sábados.
YO. Y si el destinatario no puede ir en persona?
ELLA. Tiene que mandar a otra persona con un permiso firmado y fotocopia del DNI.
YO. Hostias.
ELLA. Mmmmmmmmmmmmmm
YO. Pues nada, la mandaremos solo urgente y confiaremos en la suerte.
ELLA. Urgente. Son dos noventa. Este es el resguardo. Pero aunque lleve código de barras no sirve para nada, solo para que usted sepa que ha enviado la carta. Si no llega, no puede reclamar.
YO. Hostias.
Total, que la mandé urgente. Y con los siete euros que me he ahorrado le he comprado un cirio a la virgen del Pilar al que le he pegado el código de barras del resguardo. A ver si con su intercesión, la puñetera carta llega.
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9 comentarios:
Pues con la pasta que ganas ya te podías haber rascado el bolsillo ...
jajajjaja el correo no es lo mejorcito de la raza humana jajajaj
hace poco fui por un envío de dinero y tuve que regresar tres veces y casi certificar que era yo con un tubo de sangre y un análisis de ADN cuando a la empresa que realiza los envíos le basta con que conozcas la respuesta de la pregunta clave que hace el que envía el dinero, no digo mas... jaajja
Otras opciones:
Subastarlas por internet
Ponerlas de marcalibros
Enmarcarlas
Mmmmmm, hostias, mmmm, jajajaja, me ha encantado el post, ¿Qué podemos esperar de Correos?, el día menos pensado publico yo mis experiencias con ellos...son bueniiisimas!!, besotes ;)
Hola Anónimo!
a pesar de "la pasta que gano", tengo un problema. Y es que cuando pretenden tomarme el pelo me sale la vena tacaña y protestona. Y que me cobren 32 veces más de lo que cuesta un sello por tener la seguridad de que la carta llega, me toca las narices. Y en estos casos, sinceramente, me da igual ocho que ocho mil.
¿solo el análisis de sangre Lilyth? Pufff, y si me apuras, hasta la radiografía del dentista. Para unas cosas tanto y para otras tan poco...
Buenas opciones, Gabriel. Si al final no llegan, las escanearé y las colgaré en el blog.
Duncan por favor, cuentalo. O mejor aún, manda a Michel a echar la carta... Aunque claro, supongo que su país tendrá su propio servicio de correos, no?
jajaja! el personal de correos, con sus excepciones (supongo, porque yo no conozco ninguna) son lo peor!! ¡que fuerte!
Cobrar por un servicio que no se da se llama ESTAFA, pero como son fucionarios es una estafa legal? ¿o como va éso?
¡Que mundo más extraño que nos ha tocado!
Besos!
Con Correos hemos topado... que no tengas nunca que mandar un paquete porque ahí sí que te la clavan...
Pues envíalo por un mensajero privado y verás lo que te cuesta: 12 euros a provincias limítrofes y a partir de ahí empieza a sumar. Por cierto, Correos es un servicio público privatizado, por lo que los empleados ya no son funcionarios.
XD Me he reido un montón con este post! jaja la verdad es q es de escena de película cómica! Hoy todo vale una pasta... Supongo q con tanto correo electrónico deben de aprovecharse de los otros servicios para compensar... Aún así, es un robo!
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