domingo, 14 de diciembre de 2008

ORGULLO Y PREJUICIO


Al final va a resultar que FHMP me quiere un poco o al menos, eso deduzco cuando el pobre se traga estoicamente a mi lado las seis horas completas de “Orgullo y Prejuicio” versión BBC. O sea, la mejor del mundo.

Claro, no es lo mismo comentar la gloriosa salida del lago de Colin Firth/Mr.Darcy con una amiga que con él, que se limita a gruñir ante mis observaciones más que detalladas sobre como se pega la camisa a su torso o la pinta tan estupenda de las piernas bajo los pantalones mojados.

Sin embargo, entre mis babeos y sus bostezos, se planteó un debate de cierto interés. Antes que nada y para aquellos que no conozcan la historia, esta se resume en la lucha entre las convenciones sociales y el amor verdadero (original, eh?) e implica un puñado de personajes que no son lo que parecen e historias entrecruzadas. Pues bien, justo en el momento en que tras declararse a Elisabeth y ser rechazado por un montón de motivos que se resumen en uno, ser un capullo, el orgulloso Darcy le escribe una carta explicándole algunos pasajes de su pasado y corre a hacerse el encontradizo en el bosque para dársela, FHMP abrió los ojos y soltó:

- Anda que soy yo ella y para ratos la leo.
- ¿Cómo?.- dije yo.
- Pues eso, que ya le vale. Que el tío le ha dicho una sarta de barbaridades que no veas y ella va y le coge la carta. Para ratos yo.

Joer. Y en ese momento, pensé que con una frase, FHMP se cargaba la novela entera, todas la historias del mundo que han prosperado gracias a segundas oportunidades y por extensión me condenaba a mi a convertirme en una Darcy versión femenina, despreciada cualquier día de estos virtud a mi reconocida incontinencia verbal y lo peor de todo, sin posibilidad de redención!!!.

Para acabarla de arreglar, mientras me comprendía el alcance del tema, me di cuenta de que el hoyito de la barbilla de FHMP es clavao al de Colin Firth. Así que volví a la carga.

- Quieres decir que ella no debería darle una segunda oportunidad?
- No.
- No? Por qué no?
- Pues porque no. Porque él le ha dicho cosas muyyyyyyyyyyyyyyyyyyyy gordas y eso no se arregla con una cartita.

Joer. Y yo que me he pegado toda la vida disfrutando y dando segundas, terceras y hasta séptimas oportunidades. Y vale que hay gente que no merece ni siquiera la primera, pero todos tenemos días malos y meses aún peores, todos hemos metido la pata y nos hemos equivocado y casi todos hemos tenido la suerte de contar con otras oportunidades para remediar en lo posible el roto. Incluso Darcy. Y precisamente si Darcy que es la cumbre de la soberbia y el orgullo fue capaz de reblar por amor... como no vamos a hacerlo los demás?



4 comentarios:

Duncan de Gross dijo...

Mmmmm, bueno, la vida real es distinta, quizás F pensara distinto si le tocara de cerca...o utilizara más la empatia...¿no?

Anónimo dijo...

Siempre depende. Del tipo de relación, de las cosas q se digan, si es realmente puntual o se prolonga en el tiempo, etc, etc, etc. Pero yo soy de la cuerda de F. Terceras oportunidades??? Eso q es??

cristal00k dijo...

Me encanta Orgullo y prejuicio. Lloro como una burra cada vez que la miro. Pero entiendo bien a FHMP (como me gusta este acrónimo) uno, no puede largar lo que quiera y luego pretender que no ha pasado nada, porque te escribo unas líneas. ¡Vaya morro!
Pero las relaciones tienen, caminos, caminitos y vericuetos inverosímiles... y uno se sorprende de lo que puede llegar a hacer y ceder, cuando las cosas son en primera persona...
De todas formas, te aconsejo moderación verbal querida, vaya a a ser... que de FHMP pase a OSEI
(Ogro Sorpresivo E Inesperado)jajaja.
Un beso María.

Rocketon dijo...

Yo la peli ésta no la he visto pero mira, María, FHMP es un crack y no está de más que, de cuando en vez, te baje al terreno de lo real.
Lo dicho, un crack. Si sigues escribiendo sobre los comentarios que él te hace, al final haremos un club de fans suyo.